La ingesta de alimentos de cualquier tipo —papas fritas, manís, galletas, etc.— y el traslado de animales está prohibido para quienes quieran abordar una cabina del Teleférico Metropolitano La Paz-El Alto, informó el coordinador de la Unidad de Transporte por Cable del Ministerio de Obras Públicas, César Dockweiler.
“En el caso de los animales es una medida de precaución para evitar que éstos se inquieten y provoquen problemas. La restricción de los alimentos tiene que ver con la limpieza de las cabinas”, explicó el funcionario.
Como los habitáculos del teleférico prestarán servicio ininterrumpido entre las 05.00 y las 23.00, no pueden ser sacados del sistema para ser barridos ni limpiados, por lo que los responsables de andén se encargarán de que los viajeros no introduzcan dulces, galletas y helados, entre otros.
Los pasajeros tampoco podrán transportar garrafas de gas natural ni bidones que contengan ningún tipo de combustible, ni material inflamable.
“Las personas pueden llevar cómodamente las bolsas que le quepan en la mano, que se pueden acomodar tranquilamente debajo de los asientos, pero no se permitirá carga adicional como un costal de papas”, reiteró.
Dockweiler anunció que en los próximos días se lanzará la campaña educativa Cultura Teleférico, destinado a orientar a las personas sobre el cuidado que se debe tener en este tipo de transporte para evitar que sea rayado o destruido de forma intencional.
Los asientos estarán destinados a todos, aunque las personas mayores podrán llevar a sus niños pequeños, de hasta tres años, sentados en sus rodillas si es que no pagan el pasaje. “Sin embargo, en horas que no son de alta demanda, los niños podrán ocupar un asiento sin necesidad de haber pagado”, añadió.
Otro de los beneficios que se tendrá en las llamadas “horas valle” (menor demanda) o los fines de semana será que se podrá transportar bicicletas, pero ese plan se pondrá en marcha una vez que se haya hecho la evaluación del servicio de la Línea Roja, que tiene 2.393.26 metros de extensión (2,3 kilómetros) y funcionará con 109 cabinas, cada una con capacidad para llevar a diez pasajeros sentados u 800 kilos.
Feriantes de la 16 impiden el paso
El Gobierno Autónomo Municipal de El Alto trabaja en un plan para reubicar a los comerciantes de la feria 16 de Julio, que están en inmediaciones de la estación de salida de la Línea Roja del teleférico, a la zona Obreros Ferroviarios.
En caso de que la negociación fracase, la comuna tiene dos alternativas: construir un paso peatonal o una arteria paralela a la avenida Panorámica Norte “Esa es una labor que le corresponde a la municipalidad de El Alto y ya se ha coordinado para intentar dar una salida a este pequeño inconveniente”, señaló el coordinador de la Unidad de Transporte por Cable (UTC), César Dockweiler.
Durante una visita que hizo La Razón a la estación 16 de Julio comprobó que los jueves y domingo todas las vías adyacentes están copadas por comerciantes y que la arteria queda inhabilitada para la circulación vehicular, requisito para que desde los barrios alteños arriben los usuarios del servicio.
Este diario intentó comunicarse con el secretario ejecutivo de la Alcaldía de El Alto, Sergio Choque, para conocer los avances de la negociación, sin embargo esa autoridad no contestó su teléfono móvil.
Dockweiler precisó que si no se llegan a acuerdos con los feriantes, el gobierno municipal mostró su disposición de construir un paseo peatonal, una especie de vía balcón, desde la Ceja hasta la estación 16 de Julio, que sería ubicada sobre el farallón de la autopista La Paz-El Alto.
“Tampoco se descarta edificar una vía exclusiva para la circulación del transporte paralela a la avenida Panorámica Norte”, agregó. La parada de salida de este ramal busca ser la puerta de ingreso a la feria alteña. Por ello, en esa estación se instalarán paneles informativos sobre los bienes que están a la venta.
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